
Esto es así porque los taxista que pertenecen a la “élite” del aeropuerto suplicaron tener una tarifa diferenciada porque no les era rentable esperar casi 2 horas hasta que llegue un vuelo, mientras hacían sociales y jugaban a las cartas, y realizar un viaje a barrio Poeta Lugones por 10 míseros pesos. “Concedido”, dijo el hada madrina del Consejo Deliberante (o Consejo Delirante, como le guste) y hoy la tarifa aérea es un hecho. Ya lo creo que es aérea, si está por las nubes (CUAK).
No tengo problema en referirme a este abuso, ya que yo no reclamé para que se implemente esta tarifa complementaria, ni pertenezco al "grupo de beneficiarios". Legalmente podría levantar pasajeros en el Aeropuerto y cobrar esta bajada de bandera recargada. Fácticamente no puedo, si es que me quiero ahorrar un par de problemas provenientes de mis colegas de la élite.
Un detalle: los remises (verdes) no tienen esta tarifa complementaria. Si usted llama a alguna remisería para que lo vayan a buscar al Aeropuerto, se ahorra unos buenos manguitos.
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